(MINUANAS).
Llegará el día en que olvidaré el nombre de las cosas.
Aquello que amo se esfumará en la niebla.
El pájaro, o la flor, o el agua clara,
serán sólo un sonido ,un
aroma,
o sólo apenas algo
que mueve el aire que no sabré
que es el aire.
Me duele ir quedándome ciego.
No distinguir.
No saber.
No escuchar.
No atreverme a encontrarme ante el espejo.
Me da terror fingir que
sigo vivo.
No recibir ternura.
No mirar a los ojos a nadie
que me mire.
No tocar otra piel y
conmoverme.
Despertarme y que todo esté
dormido en mí y en mis
afueras..
Llegará la noche de ese día
y mi alma me dirá que al fin soy libre.
Y podré inaugurar sonidos nuevos,
y tocaré la luz en vuelto en risa.
Llegará la noche de ese día
y mi alma me dirá que al fin soy libre.
Y podré inaugurar sonidos nuevos,
y tocaré la luz en vuelto en risa.
¡Ay, poeta querido! Se me ponen los "pelitos" de punta...je je...me encantó tu poema, ¿cómo no? pero me gustaría que antes de que te llegara esa noche disfrutarás un poquito más de ese día...ya sabes que yo "erre" que "erre". Besitos
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