HOMERICAS.

Habito en la liviandad del aire.
Me poso en los aleros.
Bajo a los valles y subo a las colinas.
Me vuelvo humo,almendro,aroma de jazmines.
Todo es sencillo y hondo en mis ojos dormidos.
Aspiro a lejanías.
Percibo músicas que antes no percibía.
( porque hay sonidos que emergen
 desde lo más profundo de la tierra).
Los niños me sonríen 
como si vieran de pronto
a Papá Noel descalzo en las aceras.
Escribo en el agua palabras que no existen,
para que las sirenas las canten en febrero.
Cocino el pan que como entre poemas
que nunca podré escribir porque me olvido.
Me siento en el jardín
y presencio fascinado la lluvia que enmohece
mis pies ya calcinados de hacer tanto camino...
Vivo en la sencilla alegría de saber que estoy vivo.
Y no le explico a nadie
que el silencio es mi mundo sonámbulo y perfecto.

NO ERAS TU.      (VENECIANAS).




No sabía si eras tú o era la muerte
quien tocaba mis ojos.
No sabía si era la muerte quien mordía mi pecho,
pero yo estaba vivo .o al menos lo creía-.
No sabía si habría mañana 
o si esta paz sublime era posible.
Ahora sé.No eras tú.
Tú no existes.

Era la muerte,
y me ama dulcemente.